Cuatro artesanas, cuatro compañeras, cuatro amigas!

Quien nos iba a decir a nosotras lo que nos depararía Argentina... chicas, no me equivoco si digo que ha sido una de nuestras mejores experiencias.

Todas llegamos nerviosas, con miedo, sin saber dónde nos metíamos... algunas incluso planteándose horas antes si coger o no el avión... pero una vez aterrizadas en Buenos Aires, todo cambió. Ha sido una vivencia única en todos los sentidos... hemos trabajado, hemos sufrido, hemos reído, hemos llorado, pero ante todo, hemos conocido a gente increíble, y creo que eso ha merecido la pena.

Para ser la primera vez ante una cámara tampoco lo hicimos tan mal, claro, que ayuda con nuestras coletillas los primeros días, eso por supuesto! Además con todas las cosas que teníamos que controlar desde el primer instante de grabación... como por ejemplo, mira a cámara, habla fluidamente, deja las cosas que se vean, no mires fuera de la cámara, haz caso de los gestos que te hagamos, lee los carteles, describe tu pack... jaja, chicas... en verdad no era tan difícil!

Una aventura de la mano de una cordobesa (aunque con rasgos chinos, jaja) muy salá, una ciudadrealeña con mucho arte de adornar todas las creaciones hasta las que no son suyas, una madrileña que no pasa desapercibida y otra madrileña... no se me ocurre nada puesto que soy yo misma...